Licencia de armas tipo F

Licencia de armas C (Personal de Seguridad Privada)

Las licencias de armas tipo C son una de las más delicadas y a la que están sometidas a una rigurosa investigación antes de su autorización. Esto se debe a que en esta clase de armas se incluyen las herramientas de los vigilantes de seguridad y también para aquellos escoltas privados que pueden ser de empresas encargadas de seguridad, de las personas que resguardan explosivos.

Hay una serie de requisitos que el solicitante debe tener presente cuando quiera solicitar un porte de arma. Por ello, acá se proporciona el material necesario sobre los pasos a seguir para obtener la licencia de armas tipo C. ¿Quieres conocerlos? Entonces, ¡Empecemos!

Requerimientos necesarios

Al momento de pedir la licencia de armas tipo C se deben consignar los siguientes requerimientos necesarios: Hoja de solicitud (con los datos personales), fotocopia del DNI, comprobante de pago de la tasa correspondiente y también los certificados de aptitudes psicofísicas, antecedentes sobre violencia de género, antecedentes penales y una de la constancia de la empresa donde trabajará con el arma.

A estos documentos se les adjunta la fotocopia de un documento que lo certifique para trabajar en la empresa de seguridad. Cuando se va a sacar por primera vez el porte de armas tipo C, de forma adicional el aspirante tiene que hacer una declaración en el que el jefe de la empresa en donde se desempeñará este de acuerdo con lo que exponga. Esto por si se le da mal uso a la herramienta podría ser sometido a un proceso penal y legal.

También será necesario, en caso de que la solicitud sea por primera vez, una carta de solicitud. Esta tiene que ver con todas las pruebas necesarias a las que será sometido, dichas se explicarán en los párrafos siguientes y son importantes para verificar qué tan preparado está el solicitante para cargar un arma tipo C. La carta se debe presentar junto a los requisitos por medio de la empresa a trabajar.

Diferentes pruebas

Además de los documentos, el solicitante tiene que pasar por tres pruebas en la que se evaluará sus condiciones físicas y su formación para la obtención del porte de arma. Este es uno de los pasos a seguir para obtener la licencia de armas tipo C más determinantes para la autorización del mismo. La empresa donde se trabaje es la responsable de preparar adecuadamente a la persona para que le den el permiso.

Dichas tres pruebas consisten en: Una de conocimiento y manejo de armas (en esta se debe demostrar que sabe cómo utilizar la herramienta en el lugar donde se vaya a emplear y para casos de emergencias), ejercicio práctico de tiro –se someterá a pruebas técnicas o de entrenamiento– y, por último, ejercicio escrito donde se pondrá en práctica lo aprendido.

Para estas tres pruebas el aspirante tiene que estar preparados. En la página web de la Guardia Civil se puede descargar un documento en la cual el interesado puede capacitarse y tener conocimiento de todo lo relacionado a las armas tipo C, más que todo al momento de someterse a la prueba del ejercicio práctico de tiro que es uno de los exámenes determinantes.

Cuidado de las armas

Dentro de los pasos a seguir para obtener la licencia de armas tipo C es que una vez que se le autorice el porte de la herramienta, la persona tiene que tener claro de que solo la podrá utilizar mientras se encuentre dentro de sus funciones o trabajando en la empresa, es decir no tendrá permiso de recurrir a ella por cuestiones personales y de intereses más allá de su labor.

Además, cuando sean autorizados a portar el arma tipo C no los exime que en cualquier momento las Intervenciones de Armas de la Guardia Civil pueda pedir una revisión para verificar si se le está dando uso adecuado. Allí observarán la condición, en el caso de que no le estén dando una utilización correcta se puede revocar, por ello se recomienda manejarla apropiadamente.

Como los documentos exigidos se hacen por medio de la empresa que se le contrato y deben ser consignados en las Intervenciones de Armas de la Guardia Civil, en el momento de que la persona no pertenezca a la institución donde labora, entonces tendrá que entregar su arma nuevamente.