Equipar tu puesto de caza correctamente podrá determinar cuán cómoda será tu jornada de caza. Y esto dependerá al mismo tiempo de cuáles son tus metas, dónde y cómo cazarás. Si bien algunos de los factores en los que profundizaremos, puede que te parezcan irrelevantes, aprenderás cómo sí importan más de lo que parecen.
Desde puestos fijos o portátiles, hasta los elementos claves para equipar tu puesto, de todo ello hablaremos con más detalle a continuación.
Decidir el tipo de puesto: fijo o portátil
La primera decisión a tomar es seleccionar el tipo de puesto adecuado para tu jornada. Los hay fijos y los hay portátiles. Para la caza mayor, los puestos fijos son los más adecuados y habituales, como son los casos de torres de vigilancia o hides.
Como en la caza mayor los animales son de un mayor tamaño, el cazador necesita de un sitio que le dé una gran área de visión, lo más amplia posible. Esa que haga posible observar los movimientos de estos animales en medio de una vegetación abundante. También la altura de las torres de vigilancia, ayuda a que se puedan apreciar zonas más elevadas.
Aunque los puestos fijos sea más común relacionarlos con la caza mayor, estos no son exclusivos de ella. Pueden usarse con otras especies cinegéticas, es lo que pasa con los zorzales. Desde las torres es posible estudiar su comportamiento e indagar los hábitos que tengan y la ubicación de su dormidero o comedero. Con esta clase de información es más simple seleccionar los emplazamientos.
En cambio, los puestos portátiles son los favoritos de muchos cazadores por su gran flexibilidad y que puedan ser instalados en casi cualquier sitio. El inconveniente más grande de los puestos portátiles es que deben tener sólo el material necesario. Tendrás que transportar contigo todo el material, lo cual para algunos es incómodo.
Por esto es que se recomienda aprovechar la flexibilidad de los puestos portátiles, pero sin exagerar en el material dentro del mismo. Una tercera opción, serían los puestos acuáticos, aunque estos se usan únicamente en circunstancias especiales.
Asegurar el desplazamiento hacia el puesto: preparación y transporte
Antes de seleccionar el tipo de puesto, considera estudiar el tipo de terreno sobre el que cazarás. Dependiendo del tipo de terreno es que podrás determinar cuáles materiales necesitarás llevar y cuáles serán las mejores opciones para esto.
Con ello en mente, será momento de seleccionar qué llevarás contigo, y cómo llevarlo, debes planificar muy bien esto. Pregúntate si llevarás solo o acompañado el equipo, también pregúntate cuán largo será el camino y cuánto tiempo tardarás en llegar. El medio de transporte que usarás, es otra de las cosas en las que deberías pensar.
El transporte debe ser cómodo y seguro. Una vez te hayas preparado, y estés en el terreno, asegúrate de caminar hasta tu puesto en silencio. Quizás si no vas solo y estás acompañado de otros cazadores, sea más complicado caminar en silencio, pero es un esfuerzo que vale la pena. Si hacen ruido, los animales los van a detectar, y huirán, complicando más de lo que debería ser esa jornada de caza.
Al llegar al sitio que hayan escogido, tendrán que marcar la posición. Para esto, puedes usar una prenda llamativa, que sea fácil de detectar. No vayas a olvidarte de esta. Y cuando llegue el momento de cargar tu rifle, asegúrate de que tu munición esté en un sitio de fácil acceso. Uno en el que puedas acceder a la misma con comodidad y facilidad.
Preparar el puesto de caza ideal: todos los accesorios necesarios
Antes de empacar, considera en cuál época del año estarás. Las jornadas de caza en donde la lluvia será tu enemigo principal, no son iguales a las jornadas de caza donde lo será el calor.
El clima influye poderosamente en la indumentaria que tendrás que seleccionar y en los elementos de tu equipaje. Dicho esto, considera estos elementos:
Esenciales básicos para la jornada
Piensa en la ropa que llevarás, lo ideal es que lleves siempre contigo una prenda de repuesto y tu abrigo. Las piezas impermeables pero que te dejen transpirar son las más adecuadas. En temporadas frías o días lluviosos, llevar mantas podría servirte para protegerte o colocarlas en el terreno para que puedas acomodarte sobre ellas y cazar.
Puede que la jornada se haga muy larga, por lo que pensar en llevar comida no es una idea descabellada. Aun así, tendrás que tomar varias precauciones para esto. Una de ellas es que tienes que transportar tu comida en envases bien sellados y que no hagan ruido al abrirlos o chocar con otros objetos. Muchos animales alrededor tendrán un olfato y oído muy desarrollado. Tampoco lleves comidas muy pesadas, de esas que después de comerlas te provocarán dormir. No olvides llevar mucha agua.
Otro esencial es una bolsa para desechos, una en la que podrás eliminar los residuos orgánicos y casquillos de tu jornada de caza. Recuerda que, como buen cazador, deberías asegurarte de dejar el sitio limpio para que la naturaleza siga con su curso. Por igual, no podrás olvidarte de tu documentación, un cuchillo de remate, pilas de repuesto y munición.
Elementos recomendados para la jornada
Para mejorar tu experiencia y facilitarla, no escatimes en tu visibilidad. Lleva buenos prismáticos, del tipo que te permita observar el terreno lo mejor posible, es decir, llevar el modelo que mejor satisfaga tus necesidades. Si vas a recechar, deben ser prismáticos con excelentes aumentos y muy ligeros, para así poder transportarlos con comodidad. Por el contrario, si los necesitas para aguardos, su peso o tamaño no son tan importantes.
Del mismo modo, si cazarás en la oscuridad, aquellos con visión nocturna y térmica son más recomendados. Esos con la capacidad de observar en absoluta oscuridad. Esto dependerá de cuáles sean tus necesidades.
Si tendrás un puesto de caza fijo, los puestos de caza plegables son buenos aliados, y los favoritos de muchos cazadores. Estas estructuras parecen tiendas plegables que pueden ser fáciles de transportar al estar plegadas. Además, están diseñadas para camuflarse con tonos marrones y verdes. Incluso, hay modelos impermeables y con ventanas, desde las que podrás hacer disparos.
Una silla plegable también podría ser un buen elemento que tener en un puesto fijo de caza. Esto porque las jornadas de caza pueden ser muy largas, y agotadoras. Si llevas una silla plegable podrás descansar bien. Estas sillas deben ser ligeras y fáciles de transportar. Las hechas con aluminio o un tejido sintético, serán de ayuda para este propósito. Presta atención a la altura que tengan, las ideales son esas que dejan tus glúteos más bajos que tus rodillas, para que así, puedas levantarte con rapidez cuando sea necesario.
Por último, accesorios como los trípodes o bípodes te servirán para poner tu arma, y poder disparar con más comodidad y precisión. Ellos también sirven para reducir el retroceso. Recuerda que estos deben ser usados en terrenos que sea regulares.